Estrés, cortisol y metabolismo

El estrés

Las situaciones de estrés producen una activación del Sistema Nervioso Simpático, sobreexcita nuestro sistema nervioso.
El cortisol es absolutamente necesario, porque precisamente es la hormona que va a tratar de regular ese estrés y poder volver a activar el Sistema Nervioso Parasimpático, el freno de nuestro sistema nervioso.

Nos encontramos en un momento en el que el estrés forma parte de nuestro día a día, y parece imposible evitarlo.
Nuestro organismo está sometido a estímulos todo el día, multitud de tareas, prisas para ir a trabajar, presión laboral, noticias tóxicas en los medios de comunicación, las redes sociales.

Ansiedad, enfado, relaciones tóxicas, problemas familiares, dificultades económicas, problemas de nuestros hijos y familiares.
Nos hemos convertido en adictos a estar en una situación de alerta continua.

Un gran problema hoy en día también es darse cuenta de que estamos en una situación de estrés y los efectos que este produce sobre nuestra salud. Y es que a muchos nos sucede que la situación de estrés es tan habitual, que nos hemos «adaptado».

Y es que parece que hoy en día es imposible escapar del estrés, que produce altos niveles de cortisol prolongados en el organismo y que son base de muchísimas patologías hoy en día.

El cortisol, la hormona antiestrés

Es una hormona esteroidea que se produce en las cápsulas suprarenales, dos pequeñas glándulas que se sitúan encima de los riñones.

El cortisol aumenta en una situación de estrés para activar el Sistema Nervioso Simpático, y así poner en alerta todas las funciones necesarias para huir o pelear.

Cuando los niveles de cortisol se mantienen altos durante mucho tiempo, órganos y sistemas pueden verse afectados.

 

¿Qué órganos y sistemas afecta?

1. Sistema inmune. A mayor nivel de cortisol las defensas bajan, lo que puede derivar en alergias, enfermedades autoinmunes como el Lupus, entre otras.

2. Sistema gastrointestinal. La digestión y la absorción de los alimentos se ve dificultada cuando hay demasiado cortisol en sangre. Se produce indigestión, irritación e inflamación de la mucosa intestinal. Colon irritable, colitis ulcerosas aparecen en personas con altos niveles de estrés.

3. Sistema cardiovascular. El exceso de cortisol aumenta la presión arterial.

4. Cerebro. Cuando los niveles de cortisol suben es difícil tener un correcto descanso, las fases de sueño profundo acaban siendo periodos muy cortos durante la noche. Es también causa de dificultad para memorizar o mantener la concentración.

5. Sistema metabólico. El estrés es causa de sobrepeso. Los altos niveles de cortisol en sangre hacen subir los niveles de glucosa en sangre, favoreciendo la retención de grasa, sobre todo en el área del abdomen, y retención de líquido. Mayor antojo por alimentos altos en azúcar y carbohidratos.

6. Sistema reproductor. El cortisol elevado podría ocasionar disfunción eréctil, así como la irregularidad en el ciclo menstrual. También es causa de infertilidad, ya que impide la creación de hormonas sexuales.

7. La piel. 
Todo lo que sucede dentro de nuestro cuerpo, se refleja a nivel externo, se produce un envejecimiento prematuro de las células. Piel opaca o grasa, resequedad, descamación, problemas dermatológicos como psoriasis o acné..

8. En todos los niveles de órganos y sistemas. El cortisol alto, provocado por el estrés continúo, también es una de las causas de el síndrome de fatiga crónica, trastornos de la tiroides, ansiedad, depresión y muchas otras afecciones.

¿Qué podemos hacer?

No se trata de bajar los niveles de cortisol hasta eliminarlo. Es una hormona que activa funciones importantes.

Tenemos que bajar esos niveles, cuando realmente ya no es necesario que estén altos.

La alimentación es uno de los pilares para reducir y mantener en equilibrio los niveles de cortisol.

Adoptar hábitos alimentarios como el plan 3-1, que tiene la proporción correcta de carbohidratos para mantener el equilibrio metabólico.

Evitar grasas trans, alimentos procesados, fritos.
Si eres tendente a Sistema Nervioso Simpático, hay que reducir las grasas saturadas, sal y excitantes.

Si tienes interés en saber cómo la tendencia de nuestro sistema nervioso puede afectar al metabolismo, te invito a mi canal de Telegram, en el que hablo de todo esto, además de cómo implementar el plan 3-1 en tu día a día.

http://t.me/saludymetabolismo

Los alimentos ricos en Omega 3 protegen nuestro corazón. Estudios han demostrado bajos niveles de ácidos omega 3 en personas con ansiedad y depresión.

Pescados azules, semillas, frutos secos, agucate, aceites vegetales saludables, son fuentes ricas en omega 3.

Las vitaminas del grupo B son reguladoras del sistema nervioso. La vitamina B6 es junto con el magnesio clave en el control del azúcar en sangre.
Alimentos ricos en vitamina B6 son guisantes, zanahoria, boniato, espinaca, pipa de calabaza, huevo, quesos y legumbres.

Los alimentos fermentados son también de gran ayuda. Un equilibrio correcto en la flora bacteriana garantiza la creación de serotonina y dopamina, hormonas de la felicidad que se ven reducidas cuando los niveles de cortisol son muy altos. 
El kimchi, kombucha, chucrut, yogur de cabra, miso, son alimentos fermentados que ayudan a mantener una microbiota sana.

La vitamina C también es una gran aliada para reducir el estrés, su poder antioxidante lucha contra los radicales libres que se generan.

Pimiento rojo, brócoli, fresas, grosellas, col rizada o kale, coles de bruselas, berros, son alimentos ricos en vitamina C y bajos en carbohidratos.

La alimentación es una de las herramientas que tenemos para combatir los efectos que produce el estrés en nuestro metabolismo.
Realmente nos encontramos en una sociedad donde el estrés forma parte de nuestro día a día en cualquier rincón donde nos movamos.

Las situaciones no podemos siempre evitarlas, pero sí podemos controlar de qué manera nos afectan.

En mi programa «Salud y Metabolismo. Biorregulación» hago un estudio personalizado de los hábitos de la persona y creo un método a medida para devolver el equilibrio al sistema nervioso.
Puedes contactar conmigo y consultar personalmente tu caso sin compromiso en el enlace de whatsapp que ves aquí abajo

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